Si has elegido la maternidad para tu vida y es tu primera vez gestando, de seguro tendrás muchas dudas y probablemente en cada pequeña decisión lo primero que se vendrá a tu cabeza será la salud de ese ser que se está formando. Y, si ya eres madre, sabes de lo que estoy hablando. Es posible que venga a tu mente el recuerdo de más de alguna situación en la que lo ideal era no medicarse, pero tener que “aguantarse” un malestar tampoco te hacía sentir bien.
La alimentación y actividades cotidianas se ven modificadas en busca de lo que es mejor para el feto y en eso, podemos cambiar muchos hábitos, pero ¿qué sucede cuando nos sentimos enfermas o tenemos molestias y no podemos o no queremos tomar medicamentos?, y esto no termina con el nacimiento, se extiende durante el período de lactancia.
¿Te imaginas un resfrío embarazada?, ¿dolores en general?, ¿alergia estacional?, ¿molestias lumbares?, ¿acidez y/o reflujo?, ¿pesadez en las piernas y retención de líquidos?, ¿náuseas y vómitos durante la gestación?, ¿ansiedad de comer?, ¿estreñimiento?
¿Qué sucede cuando llegas a la semana 30 y tu guagüita está podálica y el médico dice que hay que esperar a que se de vuelta solo?
¿Inducir el parto o dejar que se inicie de forma natural?
¿Tomar medicamentos que estimulen la producción de la leche, o buscar la forma de promover que el organismo la genere de forma natural?
¿Y las emociones durante la gestación y puerperio…, cómo podrías manejarlos sin afectar a tu hijx que está lactando?
Todo lo que estoy mencionando puede ser tratado con medicina tradicional China, y no siempre será con agujas de acupuntura, también usaremos moxas o masaje tuina.
La acupuntura será con poquitas agujas, de preferencia en auriculoterapia (maravilloso subsistema que nos permite llegar a muchas molestias y enfermedades) y te ayudará con los síntomas molestos, dándote además una bienvenida sensación de relajo y de calma general.
No tiene contraindicación ni efectos secundarios, por el contrario, es una terapia que te permitirá solucionar muchos síntomas, y si la indicación de medicación es inevitable, puede ayudar a que la ingesta de medicamentos sea menor.
El momento indicado es cuando tu sientas que lo necesitas, puedes hacerlo de manera preventiva (es lo ideal siempre) o puede ser en el momento en que vayan surgiendo las molestias; luego del parto, tonificar la sangre será el foco de importancia para que tu recuperación sea mucho más rápida, y no solo en lo físico, sino también en lo emocional. Para la medicina China lo que une el cuerpo con la mente y las emociones es la sangre, no es raro entonces que luego del parto las mujeres puedan sentirse lábiles emocionalmente, desde nuestra mirada tiene directa relación con la pérdida de sangre y fortalecerla hará una gran diferencia en tu recuperación.
Sugiero que frente a cualquier molestia preguntes, creo que siempre hay algo que se puede hacer con medicina China.
Y lo más importante es recordar que la gestación y puerperio son etapas en la vida que no tienen por qué vivirse como si estuvieras enferma, y tampoco es necesario aguantar algún malestar, mejor estimular al cuerpo para que se autorregule y te permita disfrutar tu embarazo como corresponde.
Acupunturista Ma. Ignacia Ramírez
@acupuntura.china
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“Medicina China y Maternidad. Una vida nueva”
Liu Zheng, Beatriz López Garrido
Edit. Anaya Multimedia
2018
“Medicina Tradicional China para la Mujer”
Xiaolan Zhao
Edit.Books 4 pocket
2016