Mucho más allá de ser un componente clave de la Medicina Tradicional China, de tener un origen milenario y – en lo práctico y más conocido - de consistir en la inserción de agujas muy finas en puntos estratégicos de la superficie corporal para tratar el dolor y promover el equilibrio sistémico, la acupuntura es una técnica terapéutica que tiene distintos métodos y formatos para ser utilizada, de acuerdo con la escuela o el maestro que haya instruido a quien la sigue y aplica con sus consultantes. Entonces, la acupuntura no puede pensarse fuera de la filosofía de la medicina china, que es escencialmente holística e integradora y por lo mismo, conversa óptimamente con la mirada de la salud integrativa y se complementa muy bien con sus principios y otras de sus propuestas terapéuticas.
El acupunturista Nicolás Zamara explica que en la acupuntura que él realiza y ha aprendido, desde su complemento con la mirada de la medicina integrativa, se aplican y ponen en práctica otros conceptos, terapias y técnicas que en su conjunto van sumando positivamente a la experiencia y bienestar de las y los consultantes.
¿Cuál es el valor agregado o plus que esta nueva integración hace en la acupuntura?
La acupuntura puede dar una respuesta muy rápida a muchos problemas físicos y emocionales. Por ejemplo, si hay un dolor o un estado de estrés, será capaz de aliviar, desinflamar o manejar ese estado rápidamente. Pero la idea de esta integración es acompañar además de forma completa a la persona, siempre bajo el axioma de la Medicina Tradicional China que dice “no hay enfermedades, solo enfermos”. Esto significa no ver sólo la patología, sino a la y el consultante; no vemos el dolor o manifestación de síntomas solamente, sino a la persona que hay detrás con todo su sentir. La labor entonces es acompañarlx en un cambio genuino en dirección hacia su propia salud, respetando sus creencias para un estilo de vida saludable en que vaya logrando mejorar su calidad de vida con sus propias herramientas y así permitirle a esta semilla brotar desde su interior respetando su propia naturaleza armónica.
¿Cómo es eso de brotar…?
Porque lo integral que te menciono va también por el lado emocional y mental, lo que permite, incluso, que algunxs consultantes, durante su proceso terapéutico, terminen dándose cuenta y manifestando espontáneamente que sus vidas en realidad van más por un lado que por el que creían antes…Porque junto con aliviar dolores o la manifestación de sus síntomas, se va mejorando también su vitalidad, lógica, creatividad y trascendencia de vida, las emociones se van equilibrando y una sensación de mayor bienestar y armonía van creciendo en conjunto, mejorando su salud, permitiéndoles ordenar sus vidas y crecer desde su interior, desde esa esencia armónica. En este sentido es que esa semilla, que es la y el consultante, comienza a brotar según sea su propia naturaleza.
¿Pero puede la acupuntura terminar para siempre con un dolor corporal específico?
Depende. Un dolor tiene una causa y el dolor es la punta del iceberg. La acupuntura tiene técnicas para aliviar el dolor agudo y lo hace bastante bien, pero no en el 100% de los casos, porque va a depender de la causa y de que tan avanzado este este desequilibrio energético que llamamos enfermedad. Entonces no bastará con solamente aliviar el dolor, sino que se debe observar qué es lo que lo causa, porque si sólo se trabaja en el alivio, bastará con que la persona vuelva a sus hábitos de vida nocivos causantes de su enfermedad para que el dolor regrese. Entonces, la primera parte es aliviar el dolor o síntomas negativos, luego tiene que venir una segunda parte que es beneficiar la raíz, la causa de esta desarmonía, para lo cual hay que nutrir los sistemas que están con deficiencia por un funcionamiento disarmónico. Esa causa puede ser tanto emocional como física. Y aquí es donde técnicas complementarias como la Terapia Floral actúan como un apoyo fundamental al momento de equilibrar emociones negativas que suelen estar de trasfondo frente a cualquier patología o malestar físico, con el objetivo de que el proceso sea también de aprendizaje y desarrollo personal para la y el consultante, logrando afectar positivamente en distintas áreas de su vida.
Es decir, aquí debe existir un convencimiento auténtico por parte de la persona que consulta…
Por supuesto, en todo esto es importante que la persona quiera y manifieste que quiere profundizar en esas causas, en medicina integrativa respetamos el ritmo de cada consultante. Además, de ser necesario, hay un acompañamiento y derivación, por ejemplo, con nutricionista para una persona que padece de colon irritable o requiere mejorar la calidad de su nutrición para alcanzar un estilo de vida saludable. De lo contrario, le podría ocurrir que los malestares vuelvan. Entonces, depende mucho también de cada persona. Lo mismo pasa con derivaciones a psicoterapia cuando es necesario, porque la acupuntura y terapia floral tienen límites y viceversa. Pero la acupuntura podría permitir, incluso, siempre y cuando haya un acompañamiento psicológico y médico, la disminución o eliminación de medicamentos psiquiátricos, determinación que tomará este último profesional de la salud.
¿Cuál podría ser la mirada de la acupuntura acerca del mundo en el que estamos viviendo actualmente?
Desde el punto de vista de la acupuntura se dice que estamos viviendo en una sociedad muy “yanginizada”, es decir, donde el yang, que es la energía que tiende al movimiento, a la acción, al ritmo, está muy acelerado, muy exacerbado. Debemos volver a una mayor quietud, es decir, nos falta lo contrario, más yin. Lo yanginizado se manifiesta en el alto estrés que hay y en la gran competitividad que lo genera, entre otros muchos factores. Y con todo lo que está pasando ahora en Chile los consultantes están con un nivel de estrés mucho mayor y muchos en estado de shock. Por eso es importante tener prácticas de autocuidado que mantengan el equilibrio en la salud y/o ayudarse con estas herramientas, ya sea Acupuntura, Terapia Floral, Meditación, Chikung, TRE, entre tantas otras técnicas terapéuticas integrales que apuntan a que las personas se puedan mantener más centradas, armónicas y en búsqueda del bienestar físico y mental.