Si navegas por nuestra web, te darás cuenta que hay varios artículos definiendo la Medicina Integrativa. Y es que la riqueza y complejidad (aunque tan simple a la vez) de este paradigma de salud, son difíciles de resumir en un texto. Aún así, nos aventuramos con una breve descripción, para seguir complementando y mejorando aquello ya escrito, ahora desde otro ángulo.
La Medicina Integrativa es un nuevo paradigma de salud, en el cual se integran medicinas complementarias, medicinas ancestrales y el desarrollo de la medicina científica occidental. Se toma en consideración distintos aspectos y planos de la persona, relevantes en la mantención del estado de salud y bienestar, considerando armónicamente y coordinadamente aspectos biológicos, psicoemocionales, sociales, medioambientales y espirituales de cada individuo. La Medicina Integrativa se nutre de los avances científicos y tecnológicos de la medicina actual, tomando la mejor evidencia científica y médica disponible, así como también de la inmensa cantidad de experiencia y profundidad que distintos sistemas médicos no convencionales nos aportan para la mantención de la salud. Esto permite tener una visión más global e integradora de la salud humana y de sus complejos procesos biológicos.
En la Medicina Integrativa subrayamos que no se excluye la visión médica convencional ni tampoco se usa exclusivamente terapias y medicinas complementarias. Si bien el paradigma integrativo realiza un análisis crítico a la hegemonía del modelo de desarrollo del sistema médico y científico, la medicina convencional es y seguirá siendo un tremendo y necesario pilar de trabajo para el paradigma integrativo. La Medicina Integrativa pone sus énfasis y prioriza la utilización de herramientas terapéuticas que trabajen desde una visión terapéutica sistémica, considerando las redes biológicas y la biología de sistemas como ejes de la visión de la fisiología y fisiopatología.
El énfasis de la Medicina Integrativa está en la salud y en la singularidad de cada persona en particular, y no centra su análisis desde la enfermedad. Mantener la salud y bienestar de cada persona, y recobrarla cuando se ha perdido, son los desafíos que se plantean en el ejercicio de la Medicina Integrativa. Por lo mismo la prevención, la promoción de salud, la educación continua y la medicina de estilo de vida son ejes fundamentales en la visión integrativa de la salud.
La propuesta integrativa en el ejercicio de la medicina emerge hoy como una necesidad ante una medicina científica convencional que se ha visto sobrepasada por las nuevas epidemias de enfermedades crónicas no transmisibles, y la habitual carencia de respuestas terapéuticas eficaces en mejorar verdaderamente la salud de una población más longeva, pero más enferma. La incidencia de enfermedades alérgicas, cardiometabólicas, autoinmunes, degenerativas u oncológicas han seguido aumentando, y las herramientas terapéuticas reales de la medicina convencional permiten contener algunos parámetros o tratar algunos síntomas, sin lograr realmente regular y reequilibrar la salud de las personas. No solo eso, sino que la principal herramienta terapéutica del médico convencional es el uso de medidas farmacológicas, que por sus características xenobióticas producen una serie de efectos secundarios indeseables para la salud, que pueden desencadenar nuevas enfermedades, e incluso aumentar la mortalidad de la población. Sin desmerecer la gran importancia de medidas farmacológicas habituales, el profesional de la salud integrativo cuenta con más herramientas terapéuticas que podrá utilizar para disminuir la necesidad de medicamentos farmacológicamente supresivos, mejorando la condición de salud de la persona.
En 1996 de la mano del Dr. Andrew Weil se desarrolla en la Universidad de Arizona la primera formación universitaria en Medicina Integrativa propiamente tal. También en la década de los 90, debido al altísimo interés y uso de las medicinas complementarias y alternativas (abreviadas como CAM, por su sigla en inglés), se crea en EEUU la agencia nacional para el estudio de las CAM, que luego se llamaría Agencia Nacional para el estudio de la Salud Integrativa y Complementaria (NCCIM), organismo dependiente del Instituto Nacional de Salud (NIH) del gobierno central de los Estados Unidos. Así también, académicamente se ha multiplicado el interés por parte de científicos y profesionales de la salud en comprender los alcances de medicinas no convencionales y desarrollarse en diversas disciplinas complementarias, aunando así sus caminos en el ejercicio de la medicina integrativa. Este año ya son más de 64 las facultades de medicina de las mejores universidades de EEUU que integran el consorcio para el desarrollo de la medicina integrativa. La universidades de Harvard, Yale, Duke, Maryland y Arizona son solo algunas de las que ya incorporan curricularmente la medicina integrativa en la formación de los nuevos médicos y profesionales de la salud.
En Chile el desarrollo de la Medicina Integrativa ha sido un poco más lento. Si bien existe un innegable interés por parte de las y los consultantes en el uso de terapias no convencionales, y además existe una nueva consciencia de salud por parte de los profesionales de la salud, solo se encuentran cursos o talleres aislados de distintas terapias, sistemas o medicinas alternativas, pero no existe la convergencia y análisis que entrega la Medicina integrativa como concepto y como método de ejercicio de la profesión.
En CasaFen hemos trabajado clínicamente desde el paradigma de la Medicina Integrativa hace 6 años. Más de 30 profesionales y terapeutas que se han forjado en nuestro centro médico, y hemos desarrollado y potenciado el concepto de Medicina Integrativa en nuestro medio. Una gran mayoría de los profesionales que trabajan en CasaFen han sido docentes en cursos asociados a la Medicina Integrativa y programas universitarios en pre y post grado.
En la salud integrativa Integrativa, la y el terapeuta no solo vive su profesión desde otro paradigma, sino que amplia el abanico de opciones terapéuticas para el tratamiento de las enfermedades y síntomas de los pacientes.
La Medicina Integrativa busca mantener y propiciar el equilibrio de la salud de cada individuo, y robustecer esa respuesta fisiológica reguladora. Por lo mismo, la terapéutica pondrá particular énfasis en el estímulo de la propia capacidad curativa que tiene cada organismo, lo que mejora el rendimiento del tratamiento de las enfermedades y dolencias, incluso en complemento de medicamentos y terapias convencionales.
Finalmente, uno de los ejes más importantes de la Medicina Integrativa es la coherencia del equipo de salud con el modelo integrativo que se desarrolla. Cada profesional del equipo de salud debe tener un compromiso con su propio desarrollo personal y sus acciones en el proceso de salud individual de cada uno.
Es fundamental que el conocimiento teórico sea amalgamado con la experiencia del terapeuta, que solo podrá acompañar a su paciente en sus procesos, en la medida que haya emprendido los propios.