La Nutrición en niños con autismo (TEA) CasaFen - Photo by Tiago Pereira from Pexels

La Nutrición en niños con autismo (TEA)

¿Qué es el autismo?

Los trastornos del espectro autista establecen una gama de distintos grados de compromiso en la calidad de la interacción social, la conducta comunicativa y la restricción imaginativa de la conducta adaptativa.

El rótulo diagnóstico de TEA no es una clasificación de tipo “categorial” (presencia/ausencia de trastorno) sino de tipo “dimensional”, clasificación que incluye los diagnósticos espectrales e implica que los fenómenos se distribuyen según grados de funcionalidad o disfuncionalidad.

Características: Falta de comunicación. Retraso del desarrollo psicomotor, en especial lenguaje. Presencia de patrones restrictivos, repetitivos y estereotipados de la conducta. Trastornos del sueño

Prevalencia: Baron-Cohen et al. basado en una muestra circunscrita en la población escolar, refiere de una prevalencia de TEA en 1 de cada 64 sujetos. En cuanto a la proporción, los TEA afectan mayormente a la población masculina en una proporción de 4:1. (guía de práctica clínica de detección y diagnóstico oportuno de tea Minsal 2011)

El autismo no es un desorden psicológico, por lo tanto: No se revierte sólo con terapias psicológicas, fonoaudiológicas o de conductas. El tratamiento Biomédico se basa en el protocolo ARI (antiguo DAN) (1995)

El tratamiento biomédico consiste en: QUITAR lo que está causando el daño, ROMPER el círculo inflamatorio, REEMPLAZAR lo que está faltando en el niño y Reducir carga tóxica.

¿Por qué es importante la Nutrición y Alimentación en niños con TEA?

1. Problemas digestivos: Síntomas frecuentes: estreñimiento crónico o diarrea, dolor abdominal crónico, RGE. Esofagitis por reflujo, gastritis crónica, duodenitis crónica(67%). Hiperplasia linfoide intestinal, Colitis crónica. Por lo tanto LA CLAVE ESTA EN EL INTESTINO.

2. Teoría de los péptidos opioides: en los niños con autismo algunas proteínas no son digeridas y absorbidas como el resto de los niños, conviertiendose en péptidos opiáceos y generando algunas conductas que se relacionan con el autismo. Estas proteínas se encuentran en alimentos que contienen Gluten y Caseina.

3. Inmunidad: Los niños con autismo usualmente poseen un desbalance inmunológico, siendo muy susceptibles a virus, bacterias, hongos por lo que frecuentemente se enferman por resfríos comunes que se complican a bronquitis, amigdalitis, etc. Asimismo las dermatitis, otitis y otras infecciones.

Alimentación en niños con TEA

De esta forma, a través de la nutrición podemos apoyar el trabajo médico que se viene haciendo con el niño. Para ellos se recomienda seguir un régimen libre de gluten, caseína, soya, azúcar y aditivos. Para que el plan de alimentación entregue los beneficios debe ser estricto y eliminar los siguientes alimentos:

Gluten: Trigo, cebada, centeno, avena. Aditivos (almidones modificados)

Caseína: Leche, yogurt, cremas, quesos. Solidos lácteos, suero de leche

Soya: Carne de soya, tofu, miso, salsa de soya. Aceites vegetales, manteca vegetal, grasa vegetal, proteínas vegetales

Esto requiere reemplazar estas restricciones por alimentos nutritivos, naturales que reemplacen los anteriores, con una dieta debe ser elaborada y supervisada por un Nutricionista.

¿Qué alimentos debemos priorizar?

Arroz, maíz, papas, quínoa, leguminosas. Todas las frutas y verduras. Carnes, pollo, pavo, huevos, pescados y mariscos (excepto albacora y mariscos grasos), aceite de coco, aceite de oliva, palta, frutos secos, ghee, stevia y tagatosa.

Es importante definir horarios (comidas cada 4 horas) e incluir colaciones si pasan más de cuatro horas o si el paciente está bajo peso.

En los desayunos y colaciones es importante incluir:

  • Proteínas: Huevos duros, a la copa, revueltos, etc. Suplementos proteicos (Raw protein)
  • Carbohidratos: Frutas enteras, picadas, jugos o batidos (ricos en vitaminas). Quínoa o kiwicha inflada  (pipocas de quínoa y amaranto). Galletas de arroz, Galletas o queques SGSC caseras. Pan sin gluten casero.
  • Minerales: Leches (arroz, almendras, avellanas, quínoa).
  • Grasas: Ghee, palta, frutos secos, semillas de chía o linaza.

En los almuerzos y cenas:

  • Proteínas: Quínoa, Legumbres con arroz (80:20), tortillas de huevos. Cualquier tipo de carne, vacuno, pollo, pavo, animales silvestres, a la olla, horno, vapor, etc.
  • Vitaminas, Minerales y antioxidantes: Verduras crudas, al vapor, salteadas o al horno.
  • Carbohidratos: Arroz, Papas, Pasta  de arroz, porotos, libres de gluten, Papas fritas caseras. Quínoa, puré de legumbres.
  • Grasas: Aceite de oliva extra virgen, palta, semillas de sésamo

Es muy importante entregar diversidad de alimentos desde edades tempranas, a  veces se busca la comodidad y el seguir patrones sociales heredados, que no necesariamente son los adecuados. Se debe permitir la exploración «sensorial» permanente de alimentos, el comer legumbres, granos, sopas, etc., que beneficiarán al niño no sólo en lo que respecta a la nutrición.

Nicole Braquenier 

Nutricionista Integrativa